Desde el punto de vista gastronómico el vino es una de las bebidas ideal, sin embargo, hay que tener en cuenta que existen algunos platos que afectan al paladar de cualquier vino.
Estas son algunas pautas básicas para el maridaje de los vinos:
- No tomar vinos blancos dulces o licorosos, con el marisco, las carnes o la caza.
- No tomar grandes vinos tintos con los moluscos y los pescados.
- Separara los distintos tipos de vino por un sorbo de agua.
- Tomar los vinos blancos secos antes que los vinos tintos, y lo jóvenes antes que los más añejos.
- Servir los vinos en su mejor época o momento del año.
- El vino no debería tener características muy acentuadas que contraste con el sabor de algunos platos.
- Tomar vinos ligeros antes que los vinos con más cuerpo y los menos alcohólicos antes que los más alcohólicos.
- Tomar los vinos enfriados antes que los que estén a temperatura ambiente.
- Empezar tomando primero los vinos secos y terminar por los dulces.
